Y EL MUNDO SIGUE ANDANDO

La suplente de la madre, doña Margarita Monreal Iñiguez o la misma “drema” usurpando el nombre de su hija, nos dice que “Los franceses no se robaron a Gardel!”, sino que fue Defino, al que siguieron algunos argentinos, quien les tendió una trampa en la cuak ellos cayeron.

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Bien, eso expresa la citada persona, sin prueba alguna, solamente por la poca razón que aparenta acreditar, después de leer todas sus intervenciones y la continúa molestia que ocasiona al penetrar sin permiso, en nuestra sagrada intimidad.
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Nada la detiene, está visto que – para peor - se auto estimula y enceguece.

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Sucede que a comienzos de la década del treinta (1931), Armando Defino es nombrado por Gardel, su apoderado en la Argentina y para ese entonces Carlos ya había dado muestras de su origen francés, por lo cual los cargos que se le hacen gratuitamente a Armando. son maliciosos, perversos y fraudulentos. Además, como dice un amigo: “Creo que a esta altura es la que más perjudica y pone en ridículo a los uruguayos"
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Son estupideces que nacen de una ceguera producida por un corto entendimiento rayano en el desquicio. Por eso, no vale la pena darle otro valor que el pequeño significado de mezquindad que posee y que siempre es necesario poner de relieve, para que sepan que no pueden mentir a su antojo.

José Pedro Aresi

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